Disponemos de una sala de espera solamente para niños con la típica fuente del recreo, wii a su disposición, zona de estudio para hacer los deberes o dibujar, con juegos adecuados a su edad.
para conseguir el éxito en el tratamiento de su hijo/a es muy i mportante su cooperación.
Tú, tu hijo y el dentista, debemos trabajar juntos y en armonía.
Las siguientes indicaciones tienen como objetivo conseguir un clima propicio.
1- No se inquiete si su hijo/a llora. El llanto es una reacción normal de los niños ante situaciones desconocidas o temidas. No le diga que no puede llorar.
2- No se preocupe si la reacción de su hijo es aún más violenta, pues sin duda hay algún motivo. Siempre encontraremos algún medio para solucionar el problema odontológico. Para evitar que él se lesione involuntariamente puede ser necesario restringirle los movimientos con las manos o una mantita con Velcro, para poder llevar a cabo un adecuado tratamiento sin riesgo de lesionarse al moverse.
3- No engañe a su hijo, dígale que va al dentista. Puede explicarle que va a visitar a una persona que quiere ser su amiga. El dentista es como un médico o un profesor que se preocupa por su salud. Hemos estudiado para eso y empleamos nuestros conocimientos para contribuir a su total bienestar.
4- Si le ha prometido algún regalo para mejorar su conducta, no ponga el dentista en estas promesas, puede resultar perjudicial para la buena marcha del tratamiento.
5- Deje al niño/a expresar su curiosidad por todo lo que hay en la consulta. Para el dentista será un placer aclarar todas sus dudas, y será el dentista el que dé todas las explicaciones.
6- Evite, en presencia del niño/a, relatar cosas desagradables sobre el dentista y no permita que los demás lo hagan. Existen palabras que asustan y que es necesario evitar.
7- La mejor situación en el tratamiento se logra cuando el niño está solo en la consulta, estará más confiado.
8- Si acompañas a tu hijo/a en la consulta, intenta no intervenir en la charla del niño con el dentista. El niño se confunde cuando hablan varias personas y recibe indicaciones de varios lados, pudiendo no atender a nadie.
9- Evite que varias personas acompañen a su hijo/a.
10- Permita que su hijo/a se desenvuelva solo. Con seguridad él lo conseguirá. El dentista está para ayudarlo y pedirá tu cooperación cuando sea necesario.
11- Si es posible, no dé alimentos al niño/a en la media hora previa de la consulta (zumos, gusanitos, galletas…) para evitar que el niño/a vomite durante el tratamiento.
12- El mejor momento del día para tratar a niños de corta edad, muy ansiosos o en tratamientos algo más complejos es en la mañana por estar más descansados y receptivos. Si es el caso de su hijo/a se le realizará un justificante para poder faltar al colegio.
13- Si el niño/a tiene un peluche que es su amigo y le puede hacer sentir más seguro puede traerlo durante los tratamientos a la consulta.
14- Siempre se comenzará por una limpieza profesional de boca, para que el niño se acostumbre al ambiente dental, a que se trabaje en su boca y tengamos una boca libre de placa dónde se realizarán los tratamientos posteriores necesarios.